jueves, julio 21, 2005

Yo acuso al regimen de Castro


Mi "Yo acuso" al regimen de Castro.
Este testimonio mio corresponde a la época del campo de concentración del Mariel.
Aunque tengo muchos testimonios de ese nefasto lugar mi testimonio corresponde a nuestra llegada a las embarcaciones que nos esperaban en el puerto del Mariel, no puedo recordar fechas perdónenme mi mente se niega a recordar tanta ignominia, si recuerdo que por varios días no salio ninguna embarcación por un mal tiempo, tan pronto mejoro algo, el régimen cargo decenas de guaguas para el puerto, a nuestra llegada allí, nos esperaban en el muelle decenas de soldados con bayoneta calada para guiarnos hasta las embarcaciones. Las embarcaciones se sobrellenaban de acuerdo a la fila en que estábamos, si hasta donde el jefe de los soldados decía para una embarcación dividía a una familia eso no les importaba, a pesar de los llantos y suplicas de todos, quedaba así la familia dividida entre una embarcación y otra, las embarcaciones se sobrellenaban al máximo, de forma que apenas hubiera espacio para sentarse en el piso.
Recuerdo pequeños yates de unos 20 pies con 15 y 20 personas en el. El nuestro fue un camaronero y en el estábamos mas de 200 personas, para podernos sentar mi familia y yo, nos subimos arriba del techo de la cabina, en ese espacio unos 10 x 10, habíamos 9 personas.
Nos pasamos en los barcos anclados en el muelle día y medio, así hacinados como estábamos no recibimos ningún alimento ni agua por parte del gobierno, cuando incluso habían niños y ancianos en los barcos, mi pequeño hijo solo comió media naranja que nos dio el capitán del barco en ese tiempo, en total nos pasamos en el barco dos días y algunas horas hasta nuestra llegada a Cayo Hueso, FL.
Nuestra ultima noche en el puerto llovió y hacia un poco de viento. al amanecer temprano (serian como las 5 de la mañana) dieron la orden de que los barcos salieran del puerto. La mar estaba bastante picada y a medida que nos adentramos en el Caribe se iba empeorando, las embarcaciones que salimos juntas, unas 30 poco a poco nos fuimos distanciando producto del mal tiempo y el oleaje, pronto todos en el barco estaban con mareos y vómitos, como el espacio era tan restringido ustedes se imaginaran la escena...., muchos, producto de los mareos constantes y la debilidad quedaban casi inconciente en el piso y si nadie poder auxiliarlo, por todos estar en las mismas condiciones.


Recuerdo específicamente un pequeño yate que estaba a un yate que estaba como a una cuadra atrás del camaronero, a causa del poco espacio tenia a dos sentados en la proa y como el yate bajo el fuerte oleaje quedaban sumergidos por instantes, uno que estaba a mi lado y yo comentábamos que no los que estaban en la proa sentados sino el yate no podría soportar ese oleaje y la sobrecarga por el numero de personas. cerca de la mitad del camino, en el centro del Caribe las olas eran de mas de 12 pies de alto, nuestro se hundía la proa completa bajo agua en cada oleaje y con ella los que allí se encontraban.
El pequeño yate lo dejamos de ver por esa zona y no lo volvimos a ver mas......Ya tarde al atardecer, llegamos a Cayo Hueso, muchos a pesar del largo ayuno les fue imposible comer por los mareos, después, cuando pasaron las horas sin llegar algunas embarcaciones y de dividir a las familias en Mariel supimos que el pequeño yate naufrago llevándose a todos con el........
Yo acuso al régimen de Castro de asesinato de esos infelices y de intento de asesinato de todos los que salimos ese dia por ordenes de ellos.
Lenny

Amigos, Como prueba de mi acusacion al tirano le pego en esta pagina un telex que le mandaron a Cuba el US Coast Guard. Y el tirano respondio lanzando todas esas embarcaciones a la muerte.

On Sunday, 25 May, an estimated 107 vessels remained in Mariel; 116 returning to the United States during the day. That afternoon, a telex message was sent to the Cuban Border Guard.
****>
SEVERE WEATHER IS FORECAST FOR WATERS BETWEEN KEY WEST AND CUBA. FLORIDA HAS EXPERIENCED TORNADOS WITH HIGH WINDS AND HIGH SEAS. REQUEST THAT BOATS NOT BE ALLOWED TO DEPART MARIEL UNTIL THE SEVERE WEATHER HAS PAST.
****>
No reply was received. Late that night, cutter Dallas reported large groups of vessels departing Mariel. A similar weather warning was sent on the 26th......

ASESINOS!

De mi acusacion anterior comentaba con alguien y en realidad esta incompleta, a causa de que todos los barcos se sobrellenaron obligados por los oficiales cubanos conociendo ellos que estaban violando la Convencion del Mar(Solas1960) de la que Cuba es signataria(informacion, cada barco de acuerdo a su tamano admite determinado numero de pasajeros y debe tener salvavidas para cada uno asi como los barcos grandes botes de salvamento), a causa de esto los barcos que se hundieron en ese periodo, aunque habian barcos guardacostas americanos en las cercanias, TODOS tuvieron perdidas de vidas. Por tanto mi acusacion es de intento de asesinato de mas de 125,000 refugiados mas todas las tripulaciones.
Lenny

4 comentarios:

Anónimo dijo...

RAFAEL DEL PINO

Castro no sólo es el dueño de los cubanos vivos. Es también el dueño de los muertos y hace con ellos o con su recuerdo lo que le da la gana. Los ensalza y exhibe o los esconde, denigra y humilla: como quiera. Por eso el general Ochoa no tiene tumba, por eso el coronel Tony de la Guardia y el resto de sus compañeros fusilados no tienen tumba. Por eso en la bóveda del general Abrantes, ex ministro del Interior, han sido retiradas y confiscadas sus fotografías. Por eso a los familiares de los hombres que el régimen ejecuta se les entrega una tarjeta blanca con instrucciones de que no pueden llevar flores ni poner nombres en sus tumbas. Por eso las turbas fascistas atacan y agreden a los familiares de los asesinados en la masacre del remolcador 13 de Marzo, ocurrida el 13 de julio de 1994, cuando van a lanzar flores al mar en recuerdo de sus seres queridos. Esos muertos son muy peligrosos. El régimen se encargó de que no tuvieran ni tumba, que se los tragara el mar, pero las flores son un arma de guerra del enemigo interno y hay que castigarlo por rendir tributo a sus muertos. Hay que humillar a los que quedaron vivos y se atrevieron a desafiar al gobierno.
Yo no había llegado a comprender en toda su magnitud este aberrante procedimiento represivo hasta que pude comprobar el pasado 11 de julio en carne propia que, efectivamente, el castigo a los muertos es parte inseparable ya del extenso manual de represión de la tiranía castrista. Ese día falleció mi madre en la ciudad de Pinar del Río. Hubo que sepultarla en tumba ajena. La bóveda de mi familia había sido confiscada y los restos de mis abuelos, mi padre y otros familiares queridos habían sido lanzados a un basurero. Por alguna parte el comandante en jefe tenía que encontrar la forma de pasarle la cuenta a su ex subordinado rebelde. ``¡A matar a los muertos de este desgraciado para que se acuerde de hasta dónde puede llegar mi mano justiciera!''
Son curiosos los recuerdos que me vienen a la mente en esta hora amarga. Cuando falleció Lina Ruz, la madre de Fidel Castro, yo era el jefe de la defensa aérea en la región Oriental de Cuba, y la mayoría de los familiares de doña Lina, incluyendo a Fidel y a Raúl, llegaron por la base aérea de Holguín para asistir a sus funerales. En dicha base bajo mi mando tuve que recibirlos en la escalerilla de sus respectivos aviones ejecutivos, los Ilushin-14 CUT-824 y CUT-825. Ya desde tan temprana fecha ambos líderes habían decidido viajar siempre separados, temiendo que un tiranicidio descabezara por completo al régimen que habían implantado.
El jefe del Ejército Oriental en aquella época, el comandante Reineiro Jiménez, nos pidió a los jefes de las principales unidades que asistiéramos también a los funerales para ofrecer nuestras condolencias. Por una de esas casualidades de la vida me encontré próximo a Raúl y, aunque imperceptible para mí, Fidel se percató de que a su hermano Raúl se le habían aguado los ojos. El comandante en jefe no podía dar cabida a las reacciones emocionales que experimentan los seres humanos comunes y corrientes, así que sin medir sus palabras, ni considerar la presencia de los que estábamos a su alrededor, lo fustigó de inmediato sin piedad: ''Raúl, ¿porque lloras por esa...''? Mis dedos se resisten a escribir reproduciendo semejante frase.
¿En qué podía afectar a una revolución o la autoridad de sus dirigentes exteriorizar los sentimientos humanos en un momento como ése? ¿Mellar la imagen del tipo duro? ¿O es que este señor piensa que el sufrimiento y las lágrimas son exclusivos del sexo femenino en nuestra especie?
Aquel episodio se me quedó grabado por mucho tiempo. Cuando ocurrió, pensé que en aquellos momentos difíciles del proceso cubano su máximo dirigente tenía que forjar el espíritu de los encargados de defenderlo. Sin embargo el tiempo, ese juez tan severo, se encargó de demostrar otra cosa más compleja y perversa.
Cuando la madre de Fidel Castro murió, como queda dicho, el azar me colocó en la situación de rendirle honores, algo que no lamenta ninguna persona honorable. Cuando murió la mía, Castro se encargó de vejar sus restos, y, de paso, mi familia descubrió que había ordenado hacer lo mismo con mis demás antepasados. Algún día yo o mis hijos podremos darles sepultura y un último adiós. Algún día Fidel Castro también morirá y, por su infinita vileza, los cubanos maldecirán su nombre eternamente.
General de Brigada de la aviación de guerra cubana, huyó a los Estados Unidos hace años.
© Firmas Press

agosto 01, 2005

Roberto Iza Valdés dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.